El presidente de UPN, Javier Esparza, anunció este viernes ante el Consejo Político de la formación regionalista que no volverá a presentar para liderar el partido, aunque continuará en política, como parlamentario foral. No repetirá él, que lleva en el cargo desde 2015, ni ningún miembro de la Actual ejecutiva.
El Congreso del principal partido de Navarra, actual en la oposición y en el parlamento autonómico, celebra el 28 de abril antes del inicio, en una profunda renovación. Esparza cierra así su etapa como presidente del partido, tras haber ganado tres elecciones autonómicas consecutivas sin haber logrado, no obstante, alcanzar la presidencia de la comunidad. En diciembre, además, UPN perdió la alcaldía de la capital tras la moción de censura acordada entre PSN y EH Bildu.
«Creo que lo mejor para UPN es una nueva dirección… Voy a seguir en política activa, ayudando a mi partido en una situación muy difícil», aseguró este viernes, al calificar de «complejísimo» el actual momento político. apasionado» . «UPN tiene que aprender a tener paciencia, no tiene que haber prisas ni urgencias; afortunadamente nada es para siempre y este socialismo tampoco», señaló, para addrador: «Tendremos que combatirlo con todas nuestras fuerzas porque va a acabar cayendo» y «nada me va a hacer más feliz que volver en de Navarra». «Vamos a seguir trabajando, es el primer día de una nueva andadura para UPN» con un congreso que elige una nueva dirección. «Vamos a seguir juntos de la mano de UPN porque UPN no es necesario absolutno a todos», fue renovado antes del reencuentro por el partido y según un comunicado de Navarra TV.
Esparza tiene una dilatada trayectoria política. Fue alcalde de Aoiz entre 1999 y 2007 y luego dio el paso a la política autonómica como director gerente del Instituto Navarro del Deporte (2007-2011) y director gerente del Servicio Navarro de na Empleo-20bier (2120bier). Además, fue concejal de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local durante el Gobierno de Yolanda Barcina (2012-2015). Precisamente fue a Barcina a quien sustituyó al frente de la presidencia de UPN hace ya ocho años.
Su presidencia ha estado marcada además por momentos especialmente duros en lo político como la liberación de los prófugos Carlos García Adanero y Sergio Sayas, que saltaron la disciplina del partido y votaron en contra de la reforma de la reforma de los prófugos en febrero del entonces partido. porque Esparza había llegado a un acuerdo en ese momento con el PSN para apoyar la ley y cambiar la retirada de otras medidas en el confistorio de Pamplona.
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