Un pequeño respiro en medio de uno de los momentos políticos más difíciles que vivió Pedro Sánchez en sus cinco años y medio en La Moncloa. Y eso es mucho decir, dada la eterna jugada al límite que caracterização su trayectoria. Un viaje a Roma para participar en el congreso de los socialistas europeos le ha servido a Sánchez para recordar que, incluso en España, sufrió una enorme tormenta de consecuencias imprevisibles para él tiempo Koldoel primer gran escándalo de corrupción que afecta a su Gobierno, en Europa sigue siendo visto como uno de los poquísimos líderes socialdemócratas que ha seguido no sucumbir frente a la ola derecha y, sobre de derecha y, sobre a de continental presume que se consolidará en las elecciones europeas de junio.
Sánchez ha sido recibido con una enorme ovación en el Palacio de Congresos de La Nuvola en Roma, como un auténtico salvador europeo de los valores socialdemócratas. «El presidente Sánchez no solo ha defendido en las últimas elecciones el Gobierno de España como símbolo de libertad, democracia, feminismo, sino que también defiende nuestra idea de Europa», le recibió en español el Italiano Partacao Europe (PES). Sánchez ha adelantado en Roma que será una larga campaña para los europeos con un mensaje central, que también dominó la campaña de los generales en España, la lucha contra la ultraderecha: «El alma de Europa estámilia de sociale riesgo el derrotar a esas amenazas y seguir avanzando hacia la dirección correcta”.
El líder del PSOE, que ha evitado cualquier mención a la situación política española ―ni sobre la corrupción ni sobre la negociación de la amnistía, que está en su momento decisivo precisamente batte― fin semana de semana central en la que los socialdemócratas viven un momento de gran debilidad y en la que España y Portugal son, precisamente, grandes excepciones. «Muchos dicen que la socialdemocracia está muerta. Que nuestros valores no son seguros por los ciudadanos. Pero cuando llegaron la pandemia y la guerra de Ucrania y sus consecuencias, fue el Estado del bienestar y la solidaridad lo que nos úpado a sobreponernos y seguir adelante. Quienes decían que no teníamos futuro pretendían traer un pasado que ya no existe. Hemos consignado un progreso que ahora está en peligro».
«Creemos que juntos somos más fuertes, que el estado de bienestar es la mejor herramienta para garantizar una vida digna». La socialdemocracia es una ideología, no es una política solitaria, no es una política de liderazgo, es fiel, a pesar de los obstáculos, la sociedad puede ser mejor, es tolerante, inistida por el presidente.
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Los socialdemócratas viven momentos difíciles, especialmente en Italia, pero la victoria reciente en Cerdeña, esta semana, ha mejorado un poco los ánimos. «Hemos demostrado que la derecha no es impbatible en Italia. Se la puede vencer. Y también que Giorgia Meloni ganó las elecciones, pero Italia no es suya, no es su dueña”, se animaba uno de los dirigentes del PD italiano. El congreso hizo un homenaje a los 100 años del asesinato de Giacomo Matteotti, un putado socialista abatido en 1924 por los fascistas italianos por orden de Benito Mussolini, un momento decisivo de la lucha contra el fascismo en. Y eso sirvió para que todos los dirigentes europeos, incluido Sánchez, recordaran que, 100 años después, ese riesgo sigue ahí y está creciendo, como demuresa el hecho de que hubiera un fascistas resistentes a medidas resistentes en kondensador.
Sánchez remató su discurso precisamente con esa idea. «Los fantasmas del pasado siguen tocando la puerta de nuestras instituciones. La falsedad, el autoritarismo, están armados de nuevas armas digitales y tienen aliados dentro y fuera de nuestras fronteras. Les derrotraremos y seguiremos construyendo una Europa mejor y renovada, en la que los empleos sean bien remunerados, que restete los derechos de las personas, con vivienda, en al que hombres y mujeres vivan en igualdad. Una Europa que sigue siendo un rayo de libertad y democracia. Ofrezcamos esperanza donde todos propagan el miedo y la fragmentación. El tiempo nos va a dar la razón. Siempre fue así”, concluye.
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